Un joven se trepa por el mástil para enganchar la correa con la se izarán las banderas. Abajo, todos expectantes de si logra cumplir con la misión que se ha impuesto. Se ve frágil. Parece disfrutar de lo que está haciendo, de ocupar ese lugar destinado a esos símbolos que nos unen, que nos dan identidad.
Llegué a la escritura motivado por una búsqueda, en principio inconsciente, que se corporizó en mí cuando empecé a tener noción de lo que representaba el haber nacido en un campamento petrolero. Un lugar que, a la vez, era ningún lugar; un hábitat en el que, el único rasgo permanente, estaba conformado por lo provisorio. De hecho, mi permanencia en Cañadón Seco, duró lo que pudo haber durado la convalecencia posparto de mi madre. La imagino a ella llevándome en brazos, en el transporte de Mottino y Acuña, mezclada entre los obreros que regresaban a Caleta Olivia. Apenas unas horas de vida tenía y ya formaba parte de un colectivo. Un colectivo de obreros, llegados de todos lados buscando el amparo de eso que se erguía como una sigla que, en ese tiempo, todo lo podía: YPF. —Nacido en Cañadón Seco —decía cuando me preguntaban— y criado en Caleta Olivia —agregaba en el intento de transmitir alguna certeza acerca de mi origen. Empecé a pensar en esto cuando me vine a vivir ...
Bonita foto,se funden
ResponderBorrartrepador y mástil.
Besos
Guapíssima foto.
ResponderBorrarBesos
Y siempre en silencio... bajo el silencio...
ResponderBorrarno una bandera, mejor ondear el cuerpo.
ResponderBorrarEs sin, lugar a dudas, genial la idea de usar las fotos. Además están muy buenas.
ResponderBorrarMuy bueno lo que hizo, un poco arriesgado, pero sin dudas muy lindo gesto.
ResponderBorrarque fuerte la imagen, buff! yo no me subo ni" jarto de vino".
ResponderBorrar1 saludo
beats!
wow, qué buena foto, está la cosa para que se quede el chico colgado ahi arriba haciendo de bandera, pobrecito. jejejee
ResponderBorrargracias por tu visita.
besos
Seguro que no está subiendo para clavarse y hacerse él mismo bandera?
ResponderBorrarQuizás fue una apuesta perdida...
Linda foto y pensamiento igual,
no tan asqueroso como el mío.
Qué miedo, para haberse caído... Menos mal que cumplió la misión.
ResponderBorrarSigo...