Ir al contenido principal

Metáfora

Se respira naturaleza. Camino entre los nogales y me dejo arrullar por el canto de los pájaros. Cada paso que doy me impulsa con una energía que en pocos lugares he percibido. Hacia fondo las sierras de los comechingones se muestran con todo su atractivo. Doy unos pasos más y sin previo aviso estoy en medio de un lugar que  me obliga a parar. En mi cabeza dan vuelta imágenes que buscan palabras y siento la necesidad de parar porque siento que esas palabras están a mano en este preciso lugar. Busco entre el follaje un lugar para sentarme y trato de imaginar el momento en el que tantas voluntades sintieron lo mismo que yo y decidieron ponerle nombre a esa extraña costumbre de los hombres de juntar palabras para dibujar sentimientos. La Plaza de los Poetas puedo leer. El paisaje que se observa podría ser una metáfora de cómo –a pesar de la maleza- la escritura sobrevive y crece.

Comentarios

  1. preciosa descripción. estuve ahi con pastito mas cuidado. ahora parece mas "de verdad".
    que lindo decis!

    ResponderBorrar
  2. ¡Qué bien se debe de estar sentadito ahí entre el follaje! Besos

    ResponderBorrar
  3. como con las palabras ocurre con las plantas


    hay personas que tienen buena mano con las plantas, como un don

    otras tienen que dedicarle mucho esfuerzo para que crezcan, alimentándolas y alejando las malas hierbas

    otras las ignoran

    siempre existira la maleza...y plantas que crecerán pese a ella

    ResponderBorrar
  4. La escritura siempre perdura, simplemente porque nuestra alma danza al escribir.


    Me gusta esa plaza, y las palabras que la cobijan.



    Un abrazo.


    M

    ResponderBorrar
  5. Purita vida la que desprende tu entrada. Me encantó. Un abrazo!!

    ResponderBorrar
  6. hay vida más allá de todo, y de cada puerta...abramos las ventanas!! saltemos, abramos las puertas!!!

    ResponderBorrar
  7. Hermoso. Qué ganas de andar por ahí!

    ResponderBorrar
  8. Que bonito paisaje para escaparse y disfrutar de la naturaleza.
    Besos.

    ResponderBorrar
  9. quiero escaparme e ese sitio!!!
    relaaax!!
    muaaa

    ResponderBorrar
  10. Qué maravilla, un rincón donde crece la inspiración!!

    Un besito

    ResponderBorrar

Publicar un comentario

Entradas más populares de este blog

Encuentro

Estaba sentado en la confitería de la terminal. Lo reconocí, aunque no había leído hasta ese momento ninguno de sus libros. Era Peña, el escritor, Héctor Rodolfo “Lobo” Peña. Había escuchado hablar de él, de sus premios y de la Trágica gaviota patagónica, su libro más mentado. Nos saludamos con un ligero movimiento de cabeza y, sin decir nada, seguí con mis cosas. Pasaron más de veinte años de ese momento. Peña ya no está entre nosotros. A mí me quedó la imagen solitaria, como ensimismada, de él, sentado en la confitería; y me quedaron sus libros, los que, a medida que fui leyendo, fueron incrementando mi entusiasmo por su producción literaria. Incursionó en todos los géneros y en todos lo hizo con la misma vocación: la de ser fiel a su estilo. Los pájaros del lago fue el primero que leí. La trama tiene todos los condimentos de thriller. La historia me atrapó desde la primera página. Ambientada en la zona del Lago Argentino, los personajes y los lugares en los que acontecían los he...

De socios a chantajistas

Es difícil imaginar como se lee desde el lugar del gobernante una derrota. Pero voy a arriesgar un escenario posible: imagino al Gobernador acorralado, por un lado el pueblo con su voto desaprobó la gestión y por otro desde arriba le retiran el paraguas, que de una forma u otra lo acompañó desde que asumió. Solo en este contexto se puede entender la siguiente afirmación: Basta de chantajear con que si no me extienden las áreas no invierto , que no necesita ni una coma para ser tomada como una denuncia clara y concreta contra los que explotan el petróleo en Santa Cruz y que de acuerdo a los expresado por nuestro gobernador están dispuestos a hacer explotar a nuestra provincia. Fuente: La Opinión Austral

Facón Grande

Cuatro tiros y a la zanja ya lo dijo el coronel no sabe que hay una tumba que lo está esperando a él que lo está buscando a él, dice el estribillo d e l tema que el Gato Osses  compuso para Facón Grande, , el gaucho entrerriano que lideró en la zona de Jaramillo las huelgas obreras de 1921 y que se entregó al Ejercito Argentino -junto a una peonada- para  terminar fusilado de manera cobarde y traicionera.   Si uno viene por la ruta, en el desvío a Puerto Deseado, encontrará el monumento que se levantó en su memoria.  En La Patagonia Rebelde, la película que Olivera hizo en base al libro de Osvaldo Bayer, Federico Luppi representa el personaje de José Font y como suele decir Osses, el personaje termina desplazando a la persona que fue, ya que queda claro que el artista tomo la imagen de la película para realizar la obra.  No se si será importante saber que los gauchos por estos lados -donde los vientos suelen volar hasta los techos de las casas- no usaban s...