jueves, diciembre 05, 2013

Lo que no te mata

Me temblaba la mandíbula. No la podía controlar. Podía sentir el traqueteo de mis dientes rebotando en la boca; y  nada podía hacer, salvo esperar a que se me pase. No era miedo, ni nada que se le pareciera. Tal vez un poco de impotencia o de bronca contenida. Que jodido es  cuando el que te tiene que cuidar te agrede. Lo inesperado. Lo impensado. Por suerte pasa. Y después se siente algo de eso que te dicen cuando aseguran que lo que no te mata te fortalece.


1 comentario:

  1. Nunca pasa del todo, y es cierto que fortalece, pero al mismo tiempo deja una cicatriz por la que somos más vulnerables. A veces, demasiado.
    No deja de sorprenderme cómo eres capaz de impactar tanto con tan pocas palabras.

    Un abrazo

    ResponderBorrar

Zafar

-Cuántas veces te lo tengo que decir, -dijo zamarreándolo de la remera- no quiero verte más en esa esquina jugando con esos atorrantes, que ...