Sentía el sol sobre sus espaldas poniéndose sobre el oeste, allá, sobre la cordillera, que rompía bruscamente con el paisaje de estepa que caracteriza a la meseta patagónica. La amplitud del cielo, las extrañas figuras que las nubes provenientes del pacifico iban formando, las majestuosa figura de los álamos que sobresalen las -aún hoy- en su mayoría bajas construcciones, eran como una invitación a quedarse. Ahora podía entender a sus amigos que decían envidiarla cuando les contaba que estaba trabajando en El 0Calafate, mientras ella solo veía la combi a las mañanas y la cama cucheta a la tarde cuando regresaba. Se acordó de Andrés y hasta imaginó que lo invitaba a que se diera una vuelta por el sur para retomar una de esas tantas conversaciones que a pedido suyo siempre quedaban pendientes.
“Que lindo el glaciar, que pena que se esté rompiendo todo”, dijo con un sentimiento de pesar el turista español. Lo miró y esbozó una sonrisa, si es una verdadera pena, le confirmó. Estaba terminando marzo y pronto, al pasar semana santa, culminaría esta travesía por la patagonia sur. Cuando alguien reclamaba algo o hacia algún comentario desubicado, sonreía y buscaba la respuesta menos complicada. Se tomaba su tiempo en el parque para quedarse sola y contemplar el Glaciar Moreno, que de vez en cuando, le regalaba un desprendimiento ruidoso y conmovedor, en esos momentos levantaba la vista y agradecía a la vida poder estar aquí, disfrutado el día a día.
¡que belleza el Glaciar Moreno¡
ResponderBorrarla foto es una obra de arte que acompaña tu escrito.
te felicito por divulgar la naturaleza de nuestro país
besos
Hermoso y aterrador, no puedeo describir lo que sentí al ver la imagen y leer el post.
ResponderBorrarUna belleza!
a veces, cuando te veo pienso en lo lejos que estas... y cuando te leo, me doy cuenta que en realidad es bastate cerca. Se puede eso?.... me gusta que me pasees de esa manera.
ResponderBorrarun abrazote!
Preciosa foto,
ResponderBorrarme alegra que poco
a poco vaya disfrutando
de la belleza que le
rodea esto hará más
llevadero su trabajo.
Besos.
Adornas la naturaleza de tal manera, que me hace sentir viva en ese lugar y me provoca conocerlo.
ResponderBorrarGracias!!! abrazo, Monique.
Afilado hielo que desgarra las heridas. ¡Una foto brutal!
ResponderBorrarBesotes
siempre me estreceme aquello que se rompe o se quiebra. ¿logrará reintegrarse a la naturaleza de forma armónica?
ResponderBorrarabrazo!
Preciosa fotografía...
ResponderBorrar¡He vuelto!
Un beso enorme :)
Los glaciares siempre me fascinaron. Parecen simples pedacitos de hielo, pero esconden bajo el agua tanta enormidad. bellos.
ResponderBorrarBesitos!!!
Me encanta el texto, pero la foto.. realmente increible :)
ResponderBorrarbesos.
devuelvo visita y leo capituos de ese presente que se siente tanto.
ResponderBorrarbellísima esta foto.
precioso!!
ResponderBorrarBUENAS TARDES,EL PRESENTE YA FUE,EL TIEMPO SE LO LLEVO,HOY ESTA MURIENDO Y EL MAÑANA,SERA UN PRESENTE....
ResponderBorrarBUEN TRABAJO!INTERESANTE POST GRACIAS
LIDIA-LA ESCRIBA
...
ResponderBorrar¿Sabes?, a mí el frío me encanta. Esto que haces en tú blog es una oda a esa parte de tu país, la patagonia.
¿Será que esta historia sea un poco autográfica?
Ahora ella, en este presente XIV empieza a ver, disfrutar, conocer, amar su país y lo más importante: a vivir.
Saludetes.
Mafalda