Ir al contenido principal

Olvida IV

Cuando le ofrecieron la suplencia en la Facultad de Ciencias Económicas, primero pensó en decir que no. Nunca se interesó en la enseñanza. El que sabe, sabe y el que no enseña, repetía, casi como una muletilla, cada vez que le preguntaban porque no daba clases. Sus notas -siempre destacadas-  su buena relación con el decano y el respeto que el apellido de su padre imponía en el medio, eran toda una carta de presentación. Pero no, no se veía frente a una clase impartiendo conocimientos contables. Se sentía muy cómodo trabajando en el estudio de su padre y nadie discutía que con el tiempo todo iba a quedar bajo su mando. Me lo pidió de favor el decano y es solo por tres meses, se justificó cuando tuvo que explicar, que ese día, se retiraba más temprano de la oficina. El Contador Bardacci va a tomar por estos meses la cátedra de Finanzas de Empresas, es un profesional recibido en esta casa con todos los honores, así que descuento que todos van a saber sacarle provecho, dijo el Decano y lo dejo frente a una docena de jóvenes alumnos. Ella lo miraba con especial atención, con la mano sobre el mentón y los anteojos casi sobre la punta de su nariz y esos ojos que no solo miraban sino que se dejaban ver. Alguna consulta sobre el tema preguntó y ella como si lo hubiera estado esperando, levanto la mano y con una voz suave pero muy firme se dejó escuchar; yo profesor. Contador señorita, aclaró él y sintió una turbulencia hormonal que atormentaba su cuerpo.


Comentarios

  1. ese cielo es pura turbulencia, como las hormonas del profesor
    ...
    ¿cómo las hormonas de la alumna también?

    ResponderBorrar
  2. Alberto!!! bienvenido a mi blog!! te espero alli siempre que puedas y aqui estare tambien!! me guto tu blog!
    besos

    ResponderBorrar
  3. mmm...atracción profesor-alumna, me gusta!



    :)

    ResponderBorrar
  4. ¡Hummm! Atracción fatal...
    Un abrazo!!

    ResponderBorrar
  5. Nadie está a salvo de las turbulencias hormonales.

    Un abrazo

    ResponderBorrar
  6. Evidentemente, las hormonas atormentan a todos!!

    Nadie puede escaparrrrrr!!!

    Saludos!

    ResponderBorrar
  7. Desequilibrios hormonales en la facultad de ciencias económicas… parece una imagen surrealista.
    Pero sucede.
    Saludos.


    Visite: www.lengua-libre.blogspot.com
    Filosofía, letras y otros males menores.

    ResponderBorrar
  8. Gracias por la visita y el comentario,,,

    ¡¡¡Qué bueno es Giecco!!!

    Desde 14.000 kilómetros...

    Dos abrazos

    ResponderBorrar
  9. Nadie está libre..........saludos

    ResponderBorrar

Publicar un comentario

Entradas más populares de este blog

El commodity Agua

Cada vez suena con más fuerza el concepto. Cada vez más expertos consideran al Agua como un commodity y como cualquier otro producto susceptible de comercialización tiene un valor de cambio marcado, como es lógico, por la facilidad de acceso que se tenga a ella en la región en cuestión. Los países productores de alimentos (granos y carnes) como Argentina, “venden” agua a través de sus productos exportables. Puntualmente, la agricultura, es la actividad que insume el volumen más alto de agua dulce, Según FAO (Organización de las Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación) el agro consume el 70% del total extraído. Por eso, uno de los principales objetivos de la Agricultura del futuro tiene que ver con optimizar la productividad de cada gota de agua destinada a los campos. Esta semana, en Córdoba se desarrolló el XVIII Congreso Nacional CREA 2007 . Más de 2000 productores, dirigentes, técnicos y empresarios se reunieron para debatir y reflexionar sobre diversos puntos, entre e...

No ser

Llegué a la escritura motivado por una búsqueda, en principio inconsciente, que se corporizó en mí cuando empecé a tener noción de lo que representaba el haber nacido en un campamento petrolero. Un lugar que, a la vez, era ningún lugar; un hábitat en el que, el único rasgo permanente, estaba conformado por lo provisorio. De hecho, mi permanencia en Cañadón Seco, duró lo que pudo haber durado la convalecencia posparto de mi madre.  La imagino a ella llevándome en brazos, en el transporte de Mottino y Acuña, mezclada entre los obreros que regresaban a Caleta Olivia.  Apenas unas horas de vida tenía y ya formaba parte de un colectivo. Un colectivo de obreros, llegados de todos lados buscando el amparo de eso que se erguía como una sigla que, en ese tiempo, todo lo podía: YPF. —Nacido en Cañadón Seco —decía cuando me preguntaban— y criado en Caleta Olivia —agregaba en el intento de transmitir alguna certeza acerca de mi origen. Empecé a pensar en esto cuando me vine a vivir ...

La memoria espectral de los frigoríficos

Cuando miro las fotos de los frigoríficos —ese primer intento de desarrollo industrial, que surgió como complemento del oro blanco que representó la lana ovina—, no me pregunto por qué dejaron de funcionar, porque eso tiene relación con factores externos a nosotros. Lo que me provoca —el entrecruzamiento de fotos de “ estas ruinas, impregnadas de la temporalidad” (1) , que reflejan un momento de la ocupación capitalista del territorio—, es pensar en cómo, el abordaje del pasado, puede ayudarnos a entramar los hilos de un futuro que no deja de ser incierto. ¿Son estas fotos un espejo en el que nos podemos mirar para empezar a reconocernos? Ahí se me aparece, Florida Blanca, ese asentamiento español, que -cuando deciden abandonarlo- lo prenden fuego. Imagino al aónikenk observando esa escena. Ellos que eran nómades por naturaleza, que más tarde sucumbieron frente al proceso de colonización de la tierra, tratando de entender, el porqué de esa destrucción. Pienso tambien en los ...