viernes, octubre 02, 2009

Pronóstico




Chubascos de nieve decía el pronóstico. Y era imposible imaginar que el servicio meteorológico acertara. La mañana –que me tuvo a las vueltas haciendo trámites- ni siquiera me obligó a cargar entre manos un abrigo extra. Otro día primaveral me dije. Y así anduve. Pero a media tarde, todo cambió. El viento llegó y con él, el frió cordillerano, que aprovecha y se monta sobre las brisas que nacen en el Pacifico y se refrigeran en las cumbres nevadas, para recordarnos que estamos en la patagonia sur. En donde las cuatro estaciones pueden amarrar en un solo día. Creo que eso es lo que mas me atrapa de este territorio. Lo imprevisible de su clima y de su gente. Si, creo que la gente –por estos lados- también es bastante imprevisible. A veces pasan tiempos –que para algunos resultan eternos- sumergidos en una calma propia de los cementerios y de repente, embravecen y pueden arrasar con todo. No sé que factor climático provocó esta tormenta pasajera, pero intuyo –de alguna manera- que puede despertar las reacciones mas impensadas en nuestra gente.

5 comentarios:

  1. me encanta ese clima!!!

    lo frio... me derrite.
    que contrariedad no?

    saludos!

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  2. Siempre es saludable es más saludable el frio, mientras uno tenga con que abrigarse.

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  3. Alberto:las cuatro estaciones , dicen, también acaecen en cada uno de nosotros en un sólo día también...
    Lindo y poético tu blog.

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  4. Aquí está ya muy cerca el invierno... En absoluto llega a ser tan frío como el que se aprecia en las estupendas fotografías de su blog pero de alguna forma ya lo estoy temiendo...

    Un abrazo... ( y la próxima vez no olvide ese abrigo...)

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  5. Hola alberto

    Como si me hablaras de la Ciudad de México: en un día las cuatro estaciones climáticas. En cuanto a los efectos que esto pueda causar en la gente (no me refiero a los físicos o de salud), creo que hay quienes sí tienen variaciones en su ánimo y la lluvia, por ejemplo, los pone tristes.

    Saludos y gracias por pasar a mi blog

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