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Derecho al lugar

La gente tiene derecho a mantener su residencia en el lugar donde tiene sus relaciones sociales, en sus entornos significantes, o a tener otro de su libre elección.

Toda persona que vive en un lugar que ha contribuido a construir, en el que está arraigada y que proporciona sentido a su vida, debe poder continuar viviendo en él y tienen derecho al re-alojo en la misma área si ésta es transformada por medio de políticas de desarrollo urbano o de rehabilitación de hábitats degradados o marginales.

Las autoridades locales protegerán a las poblaciones vulnerables que puedan sufrir procesos de expulsión por parte de las iniciativas privadas.

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